Si no quieres que tu equipo se encuentre inoperativo por varios días, debes chequearlo periódicamente.
Como sabrás, la diferencia entre el apilador eléctrico y el de combustión es que el primero obtiene toda su potencia de la batería, la cual le permite elevar las cargas y desplazarse.
Cómo prepararse para el mantenimiento
- La inspección de la batería y el apilador siempre debe realizarse en un piso plano.
- Cuando se revise la parte eléctrica del apilador, debes verificar que la llave de contacto permanezca apagada y la batería desconectada.
- El mantenimiento preventivo para los apiladores eléctricos se debe realizar cada 250 horas, al igual que en los de combustión. Éste debe incluir limpieza y engrase del mástil de todas las partes del equipo.
¿Qué debes revisar?
- Antes de iniciar las labores, el operador debe corroborar que la batería se encuentre cargada en el panel de control del apilador.
- Revisa diariamente el agua destilada de la batería, y si lo amerita nivélala. Si no realizas este proceso adecuadamente, la batería no se recargará al 100%, ocasionando que la máquina pierda fuerza y eficiencia en su trabajo diario. Esto ocasionaría la reducción del tiempo de trabajo.
- Para evitar que la batería se deteriore y sulfate pronto, se debe lavar semanalmente con agua y un trapo limpio.
- Es recomendable que la batería cargue durante las noches, entre 5 a 8 horas. Esto debe realizarse con más razón si al día siguiente va a trabajar, así se evita que el apilador pare en plena labor.
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Revisar los terminales de la batería al mismo tiempo que se observa el nivel de agua destilada. Considera que si éstos se encuentran flojos pueden ocasionar un falso contacto y la frecuencia de esta falla puede terminar dañando la tarjeta de control del equipo.

